jueves, 27 de junio de 2019

Península 2019

Este año ha tocado hacer doble recorrido del proyecto Península, iniciado en 2010. Además del de Granada a Ronda, a comienzos de abril, el de Caldas da Reinha a Porto al inicio de junio. Si añadimos el recorrido de pruebas del Canal de Castilla, andaré y nunca mejor dicho cerca de los 500 kilómetros a pié en este año. Muchos.


Vengo de seguir un tramo más por la costa de Portugal desde Vila Real de Santo Antonio, el tercero. Bordeando el cabo San Vicente llegué en la travesía más larga hasta Porto Covo. La segunda vez desde P Covo hasta Caldas da Reinha pasando por Sines, Setúbal y Lisboa. y, en este recorrido último me ha acercado en 9 etapas hasta Porto.

Por suerte, en esta ocasión no ha hecho calor. Nada que pudiera parecerse al horno de junio de 2017, la última vez que vine a Portugal acompañado en algunas etapas por mi hermano Alberto.





El recorrido no presentaba ninguna dificultad de navegación. Desde que llevo la aplicación maps.me he podido prescindir de los mapas y, verdaderamente, resulta imposible perderse.

Me costó algo más la planificación de mis hojas de ruta porque no siempre se puede encontrar un alojamiento "conveniente" cada 25 o 30 km. De hecho, en dos etapas no era posible. Una se resolvió con Hugo, un formidable couchsurfer de Praia de  Tocha, y el otro combinando con el tren en la estación de Guía (Marinha a Guía caminando al norte y Figueira a Guia, caminando al sur)


Como me temía, el recorrido es hermoso pero monótono. En un par de etapas ha habido que andar casi 30 km. en tres interminables rectas a través de un bosque quemado en octubre de 2018. Las localidades por las que pasa mi ruta son escasas y como ya es frecuente en Portugal, los pueblos están poco habitados. El territorio es casi plano, con campos de cultivo bien atendidos y en plena producción, incluidos los arrozales del tramo final del río Mondego.


Los albergues Pousadas de Juventude en Portugal, son mi alojamiento favorito. Normalmente están bien atendidos, casi vacíos y ofrecen un excelente desayuno. En esta última ocasión he usado los de Praia de Mira, Aveiro y Espinho. También algunos hostel interesantes como el 402 de Figueira y el muy atiborrado Cats Hostel de Porto.


Una emoción que permanece intacta es la amabilidad de la gente con la que me encuentro. En cada rincón hay una ocasión para conversar, para una mirada gentil, para un gesto de ayuda. Siempre estoy agradecido a los portugueses. He perdido la cuenta de las veces que he pisado por aquella tierra desde mi primer viaje hace 40 años.

He aprendido en este tiempo algo del idioma y otro poco de la serenidad y el silencio con el que se desenvuelve esta gente sabia.








domingo, 2 de junio de 2019

Entrevista de Radio Ubrique

A finales de mayo de 2019 Radio Ubrique me hizo una entrevista dentro del programa de deportes y de la sección Cara Norte que prepara Juan Francisco Barea.

Esta es la reseña y al final del índice aparece el podcast completo del programa y la entrevista empieza en el minuto 18:04 y termina en el 48:06


Saliendo de O'Higgins, Carretera Austral de Chile. 2015
Hoy en Cara Norte hemos vuelto a adentrarnos en el mundo de los viajes de la mano de José Díaz de Tuesta, un viajero empedernido que en 2015 se planteó el proyecto de darle la vuelta al perímetro de la península Ibérica a pie sin límite de fecha. Así, desde entonces va afrontando diversos tramos del recorrido que compagina con otros proyectos y viajes. Díaz de Tuesta es un inspector de educación retirado que desde siempre ha sentido pasión por recorrer el mundo en todas sus variables, pero especialmente en bici y a pie. De esta manera ha tenido la posibilidad de hacer cicloturismo con alforjas por lugares como la Patagonia, California, México, Centroamérica, Cuba, Marruecos o el sudeste asiático.
Para escuchar la entrevista picar aquí:

sábado, 1 de junio de 2019

Canal de Castilla

Un viajero solitario siempre recibe parecidas preguntas de la gente en cada encuentro. Después de la respuesta a si tengo hijos añaden con cortesía: 

_Y ninguno se anima a viajar con usted?

_De momento no, les contesto. Están en otra época de la vida ocupados en resolver variados asuntos.

Así que me quedé sorprendido cuando mi hija mayor, María, mostró su interés en acompañarme en la anterior caminata desde Granada a Ronda. Al menos en una parte de la larga travesía.

Granada quedaba lejos del norte de España y la experiencia de caminar largas etapas y seguidas era nueva para ella. No me pareció una buena ocasión para iniciarse.



Parecía más oportuno hacer una prueba corta y cercana.

Es así como en el apacible mayo, tras una breve planificación y el repaso de un equipo ligero nos encaminamos con decisión a hacer un par de etapas del ramal norte del Canal de Castilla, al norte de la provincia de Palencia: desde Herrera de Pisuerga a Osorno y desde aquí a Frómista.

Admirable la determinación de mi hija mayor, una mujer de 37 años en buena forma física pero que no conocía las sensaciones de miles de pasos, más de 40.000, en una larga jornada que aún te coge caminando cuando hace 8 horas que te has puesto en marcha. Ni sabía de la persecución del sol que te sigue con ahínco en tierras como aquella de raras sombras. Tampoco el tiempo lento que te invita a asimilar lo que estás sintiendo. Al fin, el reto de la soledad permanente con los únicos encuentros, sonoros pero poco visibles, de pájaros y anfibios sorprendidos. 


Para mí las sensaciones eran buenas pero extrañas. Acostumbro a caminar en solitario, en silencio o canturreando, sintiendo mi cuerpo sobre el terreno y como la nada se apodera de mi cabeza hasta que mi pensamiento se hace líquido, distante y mínimo.

Y resulta que en esta primera ocasión que camino con una hija es el lazo progenitor el que hace que esté más cerca de duplicar mi caminar solitario que de la constancia de tener compañía ajena. 

Me recreé a menudo, con simplicidad, en una emotiva idea: Viajábamos como nómadas , sin destino cierto, en la expresión mínima de una tribu: Dos humanos, padre e hija, en busca de un grupo más numeroso en el que guarecerse. Quizás ha pasado esto mismo, miles de años atrás, antes de que nos hiciéramos sedentarios.

Claro que los dos días pegados al camino de sirga del canal han tenido multitud de anécdotas que se quedarán por algún tiempo en nuestro recuerdo hasta desvanecerse en la memoria. Pero he querido quedarme con estás pocas reflexiones a compartir entre padre e hija, novatos en caminar juntos y felices de hacerlo.



Para ver el recorrido picar en estos enlaces:

Relive de Herrera a Osorno

Relive de Osorno a Frómista

Para ver la guía del Canal de Castilla picar en este enlace:

Guía del Canal