lunes, 5 de junio de 2017

De nuevo en el camino

Vuelvo a las andadas, nunca mejor dicho :-)

En unos días regreso a Portugal a seguir caminando por su fachada atlántica desde el punto en que lo dejé el año pasado. Retomaré en Porto Covo, cerca de Sines, la ruta al norte que me lleve hasta Setúbal, Lisboa y Nazaré.

El año pasado ya pude hacer un buen trozo de "Península" , recorriendo todo el Algarve y doblando el Cabo San Vicente hacia el norte sin sufrir ningún contratiempo. Creo que aprendí de los errores de entonces (la travesía de 2015)

En realidad, aun en junio, debería estar rodando en mi bicicleta por Tanzania, descendiendo desde El Cairo a Ciudad del Cabo en la que iba a ser mi travesía más ambiciosa. La suerte fue que mis preparatorias revisiones médicas permitieron detectar un cáncer de pulmón antes de que me hubiera quedado hecho trizas en esas carreteras de África.

Pero aquí estoy de nuevo, tras meses de tratamiento, con todo eánimo para acometer una travesía más. Encima con la alegría de que las tres primeras etapas estaré acompañado de mi hermano Alberto. Una compañía perfecta.

Rodando en Atlas. 2013
Con todas las programaciones de hospital y aun así no he descuidado mi entrenamiento. He caminado casi a diario desde mediados de abril aunque más moderadamente que otros años. He reducido algo el peso de mi mochila, hasta los .850 gramos, y por prudencia reduciré las etapas tanto como sea necesario. Mas que nunca voy a disfrutar!!

Este es mi plan:


Mi hoja de ruta tiene ahora etapas menos ambiciosas y un comienzo más moderado en las distancias a recorrer. Ya tengo afinadas mis primeras noches, entre albergues de juventud portugueses, acogedores y económicos, y las literas de los guest house que proliferan en el litoral portugués.

Vuelvo confiado a Península, mi gran viaje de pequeños pasos.  Esta es la duodécima vez que me pongo en camino para intentar recorrer el contorno de la península en la que vivo.  Pura geografía.  


Los días son muy largos en junio y un aire limpio y caliente invade los caminos. Las mañanas caminando junto al mar se harán tibias y azules. Es hora ya de encontrarme de nuevo en Portugal, entre portugueses, tan calmados y pacientes. 

Estoy preparado.