lunes, 29 de octubre de 2012

Malayo

     Parece que a medida que modernamente los aviones te llevan más lejos por algo menos de dinero, las fronteras se llenan de barrotes invisibles para ponértelo difícil.
   
     Esta mañana tenía yo todo a punto para coger mi vuelo a Tailandia, vía Qatar, y un joven en el aeropuerto me dio esta noticia: Como su billete de vuelta es para dentro de 4 meses y excede los 30 día que Tailandia concede a los turistas españoles o me presenta un billete de salida del país antes de ese plazo o me firma un papel por el que exonera a Qatar de los gastos de repatriación si es rechazado usted por la oficina de inmigración en Bankog.

     Que bonita manera de echarle a uno a perder los preparativos, tan minuciosos y pacientes. Que momento más malo!

     Esta claro que firmé el papel y me metí en un avión con la zozobra de que podía ser rechazado, que horrible palabra, unas 30 horas después y a 14 mil kilómetros de distancia!!!

    Cuando llegué a la medianoche a mi escala en Doha, Nuria había hecho una concienzuda indagación, solo dios sabe porque medios, para encontrar algún billete tan económico como inservible que sirviera para salir de Tailandia antes de 30 días y de cualquier manera y con destino a cualquier parte.

   Ahí está el asunto Malayo. Sus ferrocarriles ofrecen billetes desde el sur de Tailandia, a mil cochinos kilómetros de en donde en realidad voy a estar camino de Camboya. Pero ese tren nos ha vendido por 4 euros el asiento 2B en el coche L7. sale a las 4 en punto de la tarde del día 11 desde Hat Yai.

   Ese asiento irá vacío pero parece que servirá de pase. Un pase malayo para Bangkok.

Billete de tren de Malasia